El perro es el mejor amigo del hombre. Nadie duda de esta afirmación. Un perro es fiel, es dócil, cariñoso, divertido, protector...por qué entonces puede convertirse en un problema para un runner.
Los parques, urbanizaciones, zonas de recreo... son lugares donde runners y perros pueden encontrarse. Un situación de máxima tensión, que incluso puede convertirse en una situación de riesgo si, además, el can está suelto y sin protección.
¿Qué hacemos entonces? ¿Cómo actuar ante una situación así?
Lo primero es no ponerse más nervioso de lo que uno ya está y actuar de una forma alocada. Recuerda que aunque eres un buen runner, en general un perro siempre correrá más que tú; así que lo mejor es usar técnicas para ahuyentar al perro.
En el blog de GOW Trainer hemos encontrado un post hablando sobre este tema, en el que nos habla de dos métodos: el tradicional y el tecnológico.
Si somos unos valientes, hay algunas cosas que podemos hacer usando el primer método:
Levantar los brazos para parecer más grandes mientras gritas para asustar al perro. No te asegura el éxito pero igual lo asustas o a traes a su dueño o a más gente.
Encararte al animal cuando venga hacia ti. Hay que ser unpoco “echao palante” y sólo lo deberías usar si te ves muy comprometido; al menos puede ayudarte a evitar que se abalance sobre ti.
Si corres habitualamente por lugares donde simpre hay perros, lo mejor es dejar de ir por ahí, pero si no pueds evitarlo es recomendable llevar algún objeto en la mano por si algún perro se acerca. De este modo si se acerca hacia ti podrás lanzárselo para asustarle. De no ser así, recomiendan que corras en sentido contrario al perro.
Sin embargo, hay ya ahuyentadores de perros que son mucho más efectivos y, sobre todo, te evitas tener que “hacerte el valiente”.
Entre ellos, en este blog hablan de los sprays de pimienta (totalmente legales si los utilizamos con este fin) que irritará al animal sin causarle más que molestias. Para que sean efectivos hay que usarlos de frente al animal, a una distancia máxima de 4 metros y hay que tener cuidado con el viento...a ver si es peor el remedio que la enfermedad.
Otra opción son los dispositivos electrónicos que emiten ultrasonidos y señales acústicas que el oído humano no es capaz de percibir. No son perjudiciales para los bebés o mujeres embarazadas (por si corres en un parque o una zona frecuentada por ellos) y son muy efectivos. Se pueden encontrar con facilidad en Internet.
A pesar de todo, el runing puede con todo y no nos detiene ni un perro enfurecido. Ánimo y recuerda mantener la calma en momentos así. Ponerse nervioso sólo puede precipitar la gravedad de la situación.
Y si eres de los que te gusta es salir a correr con tu perro, recuerda que para ti es un placer correr con “tu mejor amigo”, así que no lo conviertas en un problema para los demás.