El
estiramiento es un método de entrenamiento que consiste en elongar la
musculatura. Practicarlo de modo constante te permite lograr una buena
movilidad articular y siempre que salgamos a correr debemos realizarlos, tanto
antes de empezar el entrenamiento como al terminarlo. Es una acción muy
importante con la que evitaremos posibles lesiones. Los ejercicios de estiramiento podrán reducir la tensión
muscular y relajar el cuerpo mejorando la coordinación de movimientos y el
conocimiento del cuerpo. Oxigena el cuerpo a la vez que ayuda a la circulación
sanguínea. Los
beneficios El estiramiento aumenta la flexibilidad y la elasticidad
de los músculos y de los tendones, con una mejora global de la capacidad de
movimiento. Además, es una forma óptima de prevenir las contracturas
musculares, en algunos casos disminuye la sensación de fatiga y puede prevenir
traumas musculares y articulares. Incluso los beneficios en las articulaciones son
notables: permite de hecho mejorar la elasticidad de los músculos y estimular
la "lubricación" articular, contribuyendo a la atenuación de las
enfermedades degenerativas como la artrosis. Los ejercicios de estiramiento ayudan también a disminuir
la presión arterial favoreciendo la circulación, facilitan la relajación
reduciendo el estrés físico y mejoran la coordinación de los movimientos. Algunas
reglas para realizarlo correctamente Antes de
estirar, calentar el músculo. Con una movilidad articular basta para calentarlo. Identifica
el grupo muscular que se debe estirar, buscar una posición cómoda pero eficaz. Mantén el
estiramiento durante 15 a 30 segundos, sin prisas. Es muy importante que el
estiramiento no supere el umbral del dolor. Intenta
hacer una o dos sesiones de 20 minutos a
la semana. Busca una actividad complementaria como el
Pilates o Yoga.