Cuando vemos correr a un atleta muchas veces sólo nos fijamos en qué posición acabó o que tiempo marcó, pero pocas veces nos fijamos en “cómo corre”, cómo mueve los brazos y las piernas, qué cadencia y ritmo tiene, etc.

Hoy nos vamos a fijar en este tema, porque creemos que es muy importante conocer algunas técnicas de carrera, que sin duda nos ayudarán a correr mejor, evitar lesiones y malgastar energía.

Cinco trucos para correr mejor

Mira hacia adelante y alinéate con tus pies. Imagina que tu cabeza está sostenida por una cuerda, como si fueras un muñeco. Mantén la barbilla alta y mira al frente, no al suelo.

Mantén tus hombros relajados y balancea tus brazos hacia el pecho y la cadera. En todo momento, este movimiento te debe de ayudar a avanzar, así que no dejes los brazos abiertos como si fueran alas, ya que esto hará que malgastes energía.

Si centras la pisada en los dedos de los pies, sobrecargarás los gemelos. Tampoco hagas que los talones toquen primero el suelo. El ante-pie es lo que debe aterrizar primero. Una ligera flexión de la rodilla en la recepción, reduce el impacto en nuestras articulaciones.

Mantén el cuerpo alineado. Hacia el final de la zancada, tu pie debe estar en línea con el suelo, detrás de la rodilla, que a su vez, tiene que estar debajo de la cadera. Para conseguirlo debes inclinarte un poco hacia adelante, de manera que tu movimiento se volverá más efectivo.

Relaja tus puños y que las manos vayan sueltas. Imagina que estás manteniendo un papel entre los dedos. Si aprietas los puños haces que los músculos se contraigan y malgastemos energía.

Como verás, correr bien también implica un esfuerzo en aprender la técnica básica y seguir algunas recomendaciones que nos ayuden a disfrutar más del running.