Imagina una bicicleta sumergida en una piscina de 1,20 m de profundidad con el agua a una temperatura de 29°, en esto consiste "Aquabiking". Un deporte que va ganando cada vez más adeptos y que se está convirtiendo en la estrella de muchos gimnasios, que no han dudado en incluirlo en sus horarios para poder satisfacer la demanda creciente que existe en torno a este deporte. Se trata de un revolucionario sistema que reúne los beneficios de la práctica de la bicicleta y de la gimnasia acuática.
Aquabiking está especialmente recomendado para personas que quieran recuperarse de alguna lesión.
Es una modalidad deportiva sencilla capaz de ser practicada por personas de cualquier edad, pero además Aquabiking está altamente recomendado para los "runners" ya que ayuda a los deportistas a reducir la retención de agua y, por lo tanto, hace sentir las piernas menos pesadas. Además, favorece la circulación de la sangre, desarrollando las capacidades cardiovasculares de quien practica este deporte.
Aquabiking está especialmente recomendado para personas que quieran recuperarse de lesiones. Reduce el impacto en las articulaciones y favorece a la hora de tener una rehabilitación más rápida y menos dura si se ha sufrido algún tipo de lesión durante los entrenamientos o en alguna competición.
Las sesiones de Aquabiking normalmente constan de tres partes:
1) Calentamiento
2) Fase de aceleración: A través de distintos ejercicios se trabaja, tanto el tren inferior como el superior
3) Estiramientos: Ayudan a relajar y recuperar los músculos después del esfuerzo.
¿Por qué practicar Aquabiking?
Si buscas una alternativa a tus entrenamientos recuerda que la práctica de Aquabiking es muy recomendable. Este deporte aporta energía y te ayudará a liberarte del estrés diario y conseguirás quemar una media de 800 cal/hora. Quizá por ello, esté considerado como uno de las actividades físicas más efectivas para deshacerse de las toxinas.
Ayuda a la eliminación de la piel de naranja de manera progresiva. Favorece la reducción de retención de líquidos además de que la refrigeración del agua durante la sesión, ayuda a reducir la presión sobre el corazón. La flotabilidad del agua permite reducir el riesgo de lesiones en: ligamentos, músculos, tendones y articulaciones.